Mérida, 19 de julio (MayaPolitikon).– La emblemática población maya de Tihosuco, hoy ubicada en Quintana Roo, celebrará en unos días el aniversario 171 del estallamiento del llamado Guerra de Castas, con cinco días de actividades intensas que van desde competencias deportivas y certámenes artísticos hasta exposiciones y ponencias, según un programa enviado a Mayapolitikon.
“Según las crónicas de la época, la tea incendiara fue prendida en Tepich las primeras horas del 30 de julio de 1847, en el que los hombres de Cecilio Chi atacaron a la población, saqueando a las pocas familias de ladinos del lugar. Anteriormente, el ejército yucateco había cometido crímenes de guerra, buscando a Cecilio. Cuatro días antes, el 26 de julio, el cacique de Chichimilá, Manuel Antonio Ay, fue fusilado en el parque de Santa Ana de Valladolid. Los “dzules” tuvieron noticias de que Ay secundaría la rebelión generalizada, preparada por los caciques y “u chun t’ano’ob” de la región que va de Peto, pasando por Valladolid y Tihosuco”, explica el doctor en Historia de Yucatán, Gilberto Avilez Tax, en su artículo La guerra que partió en dos a la Península de Yucatán.
Darán inicio a las festividades el jueves 26 de julio a las 9 am y se clausurará de manera oficial el lunes 30 a las 9 de la noche, con sendos actos oficialistas (mucha parafernalia, funcionarios aquí y allá que llegan a echar sus discursos y luego desaparecen).
Ofrendas del saka’ ( bebida sagrada a base de maíz), conferencias sobre los tres líderes mayas que condujeron la rebelión (Manuel Antonio Ay –el primero en morir–, Jacinto Pat y Cecilio Chi), una exposición fotográfica sobre los tres últimos sobrevivientes de la Guerra de Castas y la representación de la pieza teatral Conjura de Xinum son algunas de las actividades del primer día de celebraciones.
Destacan en el segundo día una conferencia sobre el “carácter de lo líderes mayas de 1847”, que estará a cargo del cronista Mario Baltazar Collí Collí, una feria de juegos tradicionales y una exposición fotográfica sobre Tihosuco en la historia, mientras que en el tercer día, domingo, además de actividades deportivas habrá un concurso de juegos tradicionales y una exposición a cargo de lugareños sobre los estudios arqueológicos realizados en el ejido.
“La guerra de castas no ha terminado”, afirma el historiador Pedro Bracamonte
En el tercer día dominan las competencias deportivas, la premiación de los ganadores en las competencias y la clausura oficial de las festividades.
Cada año la comunidad participa activamente en estas celebraciones y se prepara y hace conciencia a las nuevas generaciones en actividades diversas que se llevan al cabo en el Museo de la Guerra de Castas.– Mérida, julio de 2018.