“Un modelo de desarrollo sustentable que no nace de la comunidad no sirve”

Amina el Mekaoui durante su participación en un evento en la UADY sobre energías renovables

“Ningún modelo de desarrollo sustentable es a priori. Un modelo ideal lo diseña la misma comunidad y si no es así no sirve”, afirma la doctora Amina el Mekaoui, Cátedra Conacyt que se desempeña en el CIR-Sociales de la UADY, en el contexto de una entrevista sobre los megaproyectos energéticos que se están implementando en Yucatán.

En las comunidades mayas hay muchas cosas que hacer sobre sustentabilidad pero son trabajos de concienciación y de educación que requieren varios años de trabajo, señala en entrevista con elchilambalam.com.

El motivo de la conversación es para conocer su posición ante los magaproyectos energéticos que se están implementando en Yucatán (parques solares y parques eólicos).

Ella escucha atenta las preguntas y luego expresa que no tiene opinión sobre ellos, que no puede tenerlos porque lo suyo es científico y emitir una opinión no tendría validez.

“Mi trabajo es científico, dice: no puedo opinar sobre los proyectos porque no tengo suficiente conocimiento”, se justifica. Los megaproyectos pueden ser buenos o malos pero como científica no puedo hacer afirmaciones sin haber conocido la realidad.

Añade que sólo después de un trabajo de campo de por lo menos dos o tres años, cuando ya tenga un cúmulo de datos de todo tipo, podría entonces expresar una opinión.

Amina el Mekaoui, quien tiene una amplia experiencia en la organización de comunidades en su natal Marruecos, está entusiasmada con su labor. Actualmente trabaja sin tregua para echar a andar la tarea que se le ha encomendado. Ve una gran potencialidad en las comunidades donde proyectos van y vienen, pero no permanecen por mucho tiempo porque la comunidad no los siente como suyos.

“Mira, por ejemplo, que de pronto llegas a una comunidad y ves un asilo de ancianos abandonado. Fue olvidado por la gente. Algo falló. Fue algo que se hizo sin la comunidad. Esta no la pidió pero igual se la construyeron. La comunidad no la siente suya”, explica. Es por eso que la gente la tiene abandonada.

La clave, dice, es trabajar junto a la comunidad, acompañarla, para que vaya descubriendo sus necesidades, sus prioridades y aprenda a gestionar las cosas por sí misma.

Es relativamente nueva en Yucatán la doctora Amina el Amekaoui, pero siente que eso no es un obstáculo para desarrollar su proyecto de gran envergadura. En 2005 estuve en Yucatán para estudiar español en el Centro Peninsular en Humanidades y Ciencias Sociales (CEPHCIS). Luego me fui y estoy de nuevo de vuelta aquí desde hace nueve meses, explica.

En realidad su español es bastante bueno, aunque señala que le falta fluidez. El cronista de lo hace saber.

Habla de un proyecto en el cual trabaja arduamente. ¿Una organización? No. No se trata de constituir una organización, explica. El trabajo lo trae de encargo como Catedrática Conacyt y consiste en la organización de un Laboratorio de Acciones Sociales para desarrollar en diez años.

Ya ha elegido, por lo pronto, dos comunidades para un proyecto piloto: Dzilam de Bravo y Muna. En Dzilam de Bravo ya está funcionando un parque eólico y en Muna el proyecto de un parque solar de 700 hectáreas está trabado por un conflicto que carcome a la comisaría de San José Tipceh.

No obstante responde tajante que su proyecto nada tiene que ver con las compañías que desarrollan los megaproyectos.

¿Es casualidad que su proyecto arranque en esos dos lugares clave de los megaproyectos en Yucatán? Dice que es casualidad. En las semanas siguientes, dijo, va a elegir otras dos comunidades que incluirá en sus primeros estudios. Y no tienen que estar situados necesariamente en las áreas de megaproyectos. De este modo tendría sus grupos de control.

¿Las compañías energéticas fondearán sus trabajos? No necesariamente. Los fondos se bajarán de donde más convenga, ya sea de entidades locales, estatales o nacionales. Incluso internacionales, siempre y cuando sean las más indicadas para los trabajos que realizamos.

Sin embargo, si bien su proyecto no depende de los megaproyectos Amina el Mekaoui cree que eventualmente las empresas podrían un factor de desarrollo en la comunidad. Desde luego, luego de una evaluación de sus acciones para con la comunidad.

En Yucatán, la implementación de los megaproyectos energéticos, parques solares (paneles solares) y parques eólicos, encuentra una resistencia en una parte de la comunidad, principalmente por la forma fraudulenta en que se está llevando al cabo por los operadores de las empresas.

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